Nunca dejaré de escribir, al igual que nunca dejaré de sentir. Puedo enamorarme de las palabras. Cada verso nos hace un poco más libres aunque vivamos en la cárcel constante de nuestra mente. Incapaz de hacer que las cosas duren. Este país es un despropósito.
El que tenga ojos que vea, el que tenga oídos que escuche, y el que no pueda encontrar la paz que luche.
viernes, 6 de enero de 2012
rescatando textos
Dejo atrás corazones rotos y cicatrices abiertas. Olvido que he sufrido alguna vez. Rompo las normas, para qué sentir nada por nadie? Porque aún echo en falta el calor. Ese calor que ya ni recuerdo... Qué se sentía? Como lo echo de menos... y pasan los años y todo sigue igual, desde aquella caída y aún no consigo reunir fuerzas para levantar. Mi mente está despejada, sí, ya no te pienso tanto, es más te pienso cuanto apenas... Pero y qué? Esa herida sigue latiendo y sangrando. Estoy harta de tanto falso príncipe, de tantos cuentos de mierda, que sólo dicen mentiras. Me quema la idea de no ser amada, pero aún me quema más la de no poder amar. Ya no. Compartir, cosas buenas y cosas malas, tan difícil es? Sin mentiras ni segundas intenciones... En fin que paso de todo y de todos, ahora ya me da igual quién venga, porque para mí no sera absolutamente nada. Ya tengo a mi gente, y con eso me sobra. Así que dejad de ser tan patéticos y madurad de una puta vez.
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