El que tenga ojos que vea, el que tenga oídos que escuche, y el que no pueda encontrar la paz que luche.

lunes, 28 de enero de 2013

ódiame

Dejadme sola en mi puta eskizofrenia, no quiero saber nada de vosotros, ni mucho menos que me preguntéis qué coño me pasa, me pasa que estoy rota por dentro. Me pasa que ya no me reflejo en el azul de tus ojos, me pasa que la desidia me folla y estoy ausente de mí misma, creo que me odio. Me pasa que me callo, cuando debería hablar y que hablo demasiado cuando tendría que estar callada como una puta, pero ¿sabéis que pienso? Que si merece la pena, alguien te valorará y si no, ya saben dónde está la puerta. Y que una lágrima nunca se derrama en vano, ya que jamás las derramas por nadie, si no por ti mismo, por tu rabia interna y tu dolor intenso. Todo lo que sirva pa expulsar lo que se lleva dentro, nunca puede ser malo.

Cuestión de prioridades...


El cenicero está lleno de colillas,
y en cada cigarro me fumo la angustia
de tu ausencia,
el dolor que provocan las palabras que te callas.

El vaso de Wiskhy anda ya vacío,
me lo bebo para ver si así te ahogas en mi garganta,
dónde estás atravesado como el frío en mi pecho.

Hay algo...

Siempre hay algo que me lleva a pensarte,
aunque no estés en ninguna parte,
aunque mi alma exhale y duela
siempre hay algo que me lleva a la nostalgia, 
y me encarcela

puede que me olvide de todo mañana, 
puede que ya no me quiera
Siempre hay algo que me atrae hacia el infierno,
mas qué me queda 
si no te encuentro en éste invierno,

si mi soledad acaba donde empiezan tus lamentos,
 intentaré mantener al tiempo contento, 
con mis pretextos que siempre acaban en nada
y siempre hay algo que me salva,
aunque luego por dentro me desgarra

el pensamiento de no pensarte
al menos un diez por ciento 
de lo que realmente siento, 

siempre hay agua que emana 
del más lejano bosque 
en tu mirada azulada,
de la más pequeña gota que colma mi paciencia, 
del más efímero suspiro que suplica que no te vayas, 
que te pierdas en mis sábanas, 
y prometo no prometerte un mañana, 
porque del mañana nunca se sabe nada.






Feliz soledad no premeditada


Siniestra la sonrisa,
dolor que trae la brisa,
de los que vivimos con prisa.

He de decir que es necesaria una pausa,
entender el porqué y la causa,
de esta soledad tan desolada.

El café es sólo una excusa,
para justificar este insomnio,
lo bueno es que aparece la musa,
y yo llena de penas y óxido,
me pongo manos a la obra en mi escritorio.

Fragilidad como forma de pensar,
la música con el bombo pa sopesar,
éste invierno polar.

Lunes triste

Queréis entenderme, pero ni lo intentéis. 
Hoy sólo es un Lunes triste,
tus ojos se han quedao en mi mente formando un quiste.

Os traigo éste odio mío, para que lo alimentéis,
hace demasiado sol y no quiero salir.

No quiero verle la cara a la realidad,
llamarte, pero saber que no estás.
Aceptar de nuevo las consecuencias,
como siempre, con paciencia.

Vacía, como una botella de cava un día especial,
fría, helada, en mis ojos un infierno polar.

Resquicios de felicidad,
que desembocaban en tu mar,
otra vez se volvieron a marchar.

Dolerá un tiempo, y luego se irá,
cómo siempre, cómo nunca.

Todos los domingos me prometo cambiar,
pero llega la tristeza y me folla,
cada cual que escoja la forma de decirlo,
yo prefiero escribirlo.

domingo, 27 de enero de 2013

Raíces

No creo que acostumbrarse a la soledad sea malo. Puede que sea peor eso de acostumbrarse a alguien o a algo. La soledad es bella y eterna, siempre que sea decisión propia. Sin embargo, si nos acostumbramos a que nuestra sonrisa dependa de alguien, o de algo, al perderlo nos quedará un vacía imposible de llenar. Puesto que la soledad se amolda a nuestros vacíos y rellena cada hueco con perfección, preferimos la soledad, aunque nos aterra que algún día no la deseemos y se quede con nosotros, en lo más profundo de nuestra alma, arraigada y clavada. Que sus raíces nos destrocen las entrañas y que construya muros de miedo a sonreír por alguien.
Que equivocada estaba...

Nada es justo

Cansada, y ya está.
Rota, distraída y rota,
muy rota.

Por aceptar tantas derrotas,
por el infierno de la absenta,
un averno que nos ausenta...

Alma callada,
alma acuchillada,
sin ilusión,
sin capacidad de amar.

Alma rota, muy rota.
Me dueles pero me callo, puta.

La Luna está triste,
no disfruta.

Es un Domingo,
de nuevo salgo a morir
en la ciudad,
dónde no quiero estar,
si tú no estás.

Bebo, y ahogo penas y dramas,
pero la resaca las hace flotar,
me pierdo en tu mar,
pero ya no estás.

Y realmente no importa...
Simplemente hemos de aceptar.
Aceptar la situación,
a pesar de su sinrazón.

Continuar, cómo siempre,
no es nada nuevo,
miro al cielo y te pienso,
cómo siempre.

Pero mi alma no se vende,
y menos al Dolor,
menos a tus trágicos despertares.

Y cuando lloro,
ay, cuando lloro.

Sólo me caen las lágrimas de la decepción,
cuando lloro.
Caen las lágrimas de la rabia y el dolor.


sábado, 26 de enero de 2013

Viendo la esencia del mundo;

Tengo que conseguir quitarme de la piel el olor de tu cama, tengo que olvidar ésta inútil obsesión con tus sábanas. Eres como un fuego efímero, que quema, pero no deja cicatriz. Tengo que olvidarme de mí, toca volver a partir. Cómo siempre, me ha pillao septiembre entre tus piernas, y el dolor apenas se manifiesta, pero la rabia de tropezar con la misma puta piedra se despierta. "Ella le dijo que él la estaba llevando a un lugar dónde nunca antes había estado, pero en realidad ella lo estaba llevando a un lugar dónde se prometió no volver" ¿Lloras? No, sólo son lágrimas de tristeza, de volver a romperme la puta cabeza contra el muro de la desilusión, de reventar por dentro, mirarme al espejo, y saber que debo seguir caminando. Dejar atrás tu océano, volver a dejar que me viole la Soledad, que es la única que me ama tal y cómo soy, la única que me aguanta. Escribo sangre porque hablo dolor, la Luna estará ésta noche llena, y yo volveré a mi guarida de oscuridad eterna. Sólo sé estar allí, lejos de lo que me hiera, de lo que el corazón me hiela. Lejos de vuestra tristeza, al cobijo de la mía, con la mirada y la sangre fría, aguantando cada golpe como aguantan las tardes de martes, olvidándome de llamarte, de pensarte, de escribirte. Rozando la esquizofrenia más pura, anhelando éso que llaman cordura... Hundiéndome en las palabras, que por ahora son las únicas que de aquí dentro me sacan. También podría escribirle el silencio a mis fantasmas, atrapar a mis demonios y hacerlos cenizas, pero resurgirían cómo un fénix. Redención, ¿cómo ir a buscarte si no me encuentro ni yo? Sé que dije que iba a luchar ésta vez, pero estoy harta de mí misma y de mis quebradas expectativas, de ser tan estúpida. Eso sí, espero que vuestra conciencia, duerma tranquila. Porque la mía está ya podrida.

jueves, 24 de enero de 2013

Parece que la angustia cesa


Ésta vez voy a intentar mirar desde otro cristal,
prometo que intentaré no desesperar
cuando se funda la ciudad.

Que la ginebra calme las ansias de volar,
que la paciencia tenga en mi mente algún lugar.

Que las entrañas dejen de sangrar,
por cada cosa que no me das.

Que el frío se torne caliente, y arda.
Ardan nuestras perspectivas,
que podamos arder con ellas.

Y en lo que quede, aunque sea ceniza,
podré redescubrir el placer de observar,
tan sólo observar, nada más,
tu sonrisa.

Sin que nos corra ninguna prisa,
sin que los demonios fusilen a nuestros ángeles,
ni que pueda decir que me dueles.


- El punto que le falta a cada interrogante.

miércoles, 23 de enero de 2013

desequilibrio

Nunca dejar ver mi tristeza aunque mis letras la muestren desnuda y desvirgada.
Aunque mi cabeza explote por tanta miseria y melancolía retenida, en mi cara siempre muestro una sonrisa, el que de verdad entienda mis sonrisas, llorará por dentro conmigo, el que no, continuará sonriendo, y yo me iré alejando, es simple, cómo la primavera después de un crudo invierno. 

- El día que no nos haga falta complicarnos, el destino volará grácil y solo, sin necesidad de decisiones.




Mejor me callo, que luego me rayo,
pero por callarme me rayo,
¿qué pasaría si no me callo?


Depresiva-compulsiva

¿Qué me has hecho? 
la ansiedad se apodera de mi pecho.
Y noche tras noche, no dejo de comer techo

La ansiedad se vuelve aguda,
y peor me lo pone ésta cloaca,
decidiendo mi destino a cara o cruz,
¿Dónde estás tú?

Sé que voy a tener que ser yo,
la que pare de una puta vez éste reloj.
Sus agujas no dejan de correr,
y el teléfono sigue en silencio.

Por Dios,
déjame estar.
Tu ausencia me folla,
y lo siento todo más.

No estoy hecha pa callar,
mucho menos pa consolar,
si me ahogo yo sola en mis penas,
si me recorre tu olor neutro las venas.

¿Qué coño voy a hacer si no me sales de la puta cabeza?
Explícamelo.

al menos déjame oír tu voz,
dime que no quieres verme, 
pero hijo de puta, dímelo.

Cualquier atisbo de razón 
en mi interior,
es eclipsado por mi orgullo.




'Tirao en un sofá escupiendo mis penas, mirándome de reojo las venas...'

Noches de insomnio y esquizofrenia.

Cuán caliente me pone tu ausencia. El silencio me habla y mi piel arde. Veo tus ojos reflejados en el techo, mientras la noche ruge, y el dolor se extingue. Lo peor es la ausencia de emociones, el odio a mi álter ego a flor de piel. Y el calor recorre las entrañas, el frío se queda en tu océano, reventando los párpados. El insomnio vuelve, y el café me espera temprano. Los demonios se despiertan y el deseo dentro palpita.





'Me echaron del club de los eskizos, soy un inestable de cojones.'

martes, 22 de enero de 2013

Poetry

Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.

Tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto y por sabor.

Sin un temblor de más,
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos.

Estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna maldición.

Mis huéspedes concurren,
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor.
Yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.

Pero el rostro de vos
mira a otra parte
con sus ojos de amor
que ya no aman
como víveres
que buscan a su hambre
miran y miran
y apagan la jornada.

Las paredes se van
queda la noche
las nostalgias se van
no queda nada.

Ya mi rostro de vos
cierra los ojos.

Y es una soledad
tan desolada.


Mario Benedetti



"Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón."


No vengáis a buscarme...

Si me pierdo entre la oscuridad, no vengáis a buscarme.
Me habrá devorado la ansiedad, será demasiao tarde.
Ya no saldrá a verme ni la Luna, en una ciudad que arde.

Y si oís mis lamentos, os llamo gritando, tapad vuestros oídos.
Por mucho que os eche de menos, ya me habré corrompido.
Mis demonios devorarán mis letras, y quemarán hasta el óxido.


"La noche es más oscura justo antes del amanecer"

Tal vez un día consiga ver más allá de tus ojos azules. Tal vez algún día sepa lo que quiero. Hasta entonces sólo deseo enredarme en tu pelo. La ciudad es fría y el viento golpea las persianas de mi cuarto con violencia. No me llamas, una semana. La densidad de las horas es escalofriante. Necesito oír esa voz, ver esa sonrisa, pero no me corre prisa. Si algo me ha enseñado la vida, ha sido a esperar. Esperar es clave. el tiempo no pasa en vano, todo el mundo lo sabe. Pero es tal la impaciencia por encontrarme reflejada en tu iris, que me atrapa la tristeza en menos de un par de segundos, y ya llevo una semana esperando. Tal vez, cómo siempre he pensado, no esté hecha para estar con nadie. Suelo encapricharme, lo reconozco. Suelo reprimir mi entusiasmo, porque es de otro mundo. Nadie lo comprendería. Suelo callar ante aquellos que más hablan, y no escucho a muchos. Necesito cariño, pero necesito espacio. Una carencia implica algo que antes sobraba... No me aclaro ni yo, y eso otro martes, sin ganas de verte, bebiendo té verde.


La ciudad calla y mis ganas rechistan. 
Ojalá pudiera verte más allá de mi mente, 
más allá de mis expectativas erróneas.
Ojalá pudiera tenerte ahora en frente,
ahogarme en el mar helado de tus ojos.

Rage.


Si nos hipotecan los sueños, 
iremos a por ellos.
Es hora de reclamar la sangre,
que nos roban quitando derechos.

Es hora de que el pueblo estalle,
y no mire atrás.
Es hora de perder el miedo,
es hora de una revuelta.

Es hora de dejar de callar como las putas,
y de hacer caer a éstos hijos de puta.

No tienen otro nombre, 
la falta de humanidad les corresponde.
La dignidad humana, va delante
de los sucios corruptos que nos invaden.

Paraísos fiscales,
que en mis pupilas arden.
Ríos de sangre,
el levantamiento de los cobardes.



- Ha llegado ya la hora de luchar, hermanos. No importa el dinero, hay que hacer que todo arda. Hay que mandar un mensaje.

domingo, 20 de enero de 2013

Via crucis

Vuelve a ser Domingo, 
vuelvo a sentir vértigo por tus silencios.
Yo me callo y me alejo, 
la noche parece una puta que nos destroza,
por eso cada vez que voy a verla, 
recuerdo que prefiero encerrarme en mi refugio.

Allá donde no te beso, 
allí donde pierden significado mis sueños,
y el hastío se prostituye con mis ganas de soledad,
quemando hasta el amanecer como absenta por mi tráquea.

Un café, 
y no me apetece hablar con nadie, 
sólo quiero encerrarme,
tatuarme en las entrañas mi puta independencia, 
olvidarme de que existe el resto.
























Hacer el gesto,
y largarme.

miércoles, 16 de enero de 2013

00:17


Volveré a mi soledad,
escuchando canciones viejas,
con mil cafés sobre la mesa,
pensando en no pensar.

Será la hora de marchar,
cuando tus labios repliquen fatalidad,
cuando los versos se conviertan en heridas,
cuando de rodillas la Luna te pida.

Cuando vuelva, no volveré para quedarme,
se nos habrá hecho tarde,
no vendrás a buscarme...

El silencio de un latido ahogado,
alguna calada de un cigarro
y el whisky que nos venció sobre tu almohada.

Dónde me hallo,
donde callo.
Cómo un extraño.


Quizá no vuelvan nuestras tardes de Domingo.

Miércoles.

Por si llegara septiembre, te tengo guardado un trocito de mi pecho. Por si algo no llega al final del camino, está eso de nunca jamás rendirnos. Escuchando rock antiguo, ensimismado en sí mismo. Y yo queriendo beber de su fuente, rompiendo con mis miedos, asesinando a mis demonios. Por si llegara el invierno, y escapáramos de este jodido infierno. Si las musas que se escapan de tu pelo vinieran a vernos... Nos contarían que entre nuestras miradas nunca llegó el invierno, pero vivimos millones de infiernos. Yo me agarraría a tus pestañas, dejaría colgando cada una de mis pesadillas... Para que al despertarme yaciera en tus sábanas, para que al dormirme no tuviera la esperanza del mañana.

En el ecuador de tus miradas,,,

Déjame pensarte,
déjame perderme,
en esa piel,
que más que piel es arte.

Déjame tocarte, al menos
con la punta de los dedos,
entra en mí,
llegaremos al cielo.

martes, 15 de enero de 2013

Me desharía de todo.


Por ver sus ojos, pagaría con algo más que mis despojos.
Por tocarle, más de cien caricias de la piel me arrancaría.
Por revolverlo en sus sábanas, pagaría el precio de no ver ya jamás el alba.

Por enroscarme en su pelo, lo que más anhelo,
por oler su pecho, por romper mis miedos.

Pagaría por deshacerme de la puta melancolía,
 pero más daría por conseguir que el miedo no volviera a vencernos.


...

Me pongo a pensar en aquella noche, y me río de las pocas horas de diferencia entre dos pensamientos opuestos, en la corta distancia de tu boca y la mía.

lunes, 14 de enero de 2013

No tiene nada que ver con ahora.

Puede que pa cuando quieras volver a besarme yo ya me haya cansao de esperarte.

olvidándome de mí


Algún día dejaré de torturarme, 
entonces para mi redención será tarde, 
pero habré salido a buscarte, 
cómo una tarde de martes, 
cómo cuando sólo pensaba en besarte.

Y volverás por el camino que dejaste,
perderás por la decisión que descartaste.
Y cuando tus ilusiones estén pa el arrastre,
la desidia volverá a follarte.

Entonces convertirás todas tus penas en jodido arte,
y ni mi poesía podrá calmarte,
esas ansias de esfumarte
de cualquier parte.

Esas ganas de desastre, 
de entrañas desgarradas, dejando pa el arrastre,
mis ganas de besarte.

Y perderás la noción constante,
que hizo que dejaras de llamarme...
Entonces estaré lejos, cómo una tarde de martes,
y dejará de torturarme,
ese amor que tengo por alambre.

Esta espera me mata.

Algo que se hace porque se siente no puede considerarse un error.

Una fracción de segundo puede decidir la historia.





 "Aquél que dijo "más vale tener suerte que talento", conocía la esencia de la vida. La gente tiene miedo a reconocer que gran parte de la vida depende de la suerte, asusta pensar cuántas cosas escapan a nuestro control.


En un partido hay momentos en que la pelota golpea con el borde de la red, y durante una fracción de segundo puede seguir hacia delante o hacia detrás. Con un poco de suerte sigue hacia delante y ganas, o no lo hace y pierdes."

-Match Point
"A veces encontramos nuestro destino en el camino que tomamos para evitarlo."

domingo, 13 de enero de 2013


Té de rosas.

¿Cómo decirte que me tienes eclipsada?
Que las notas de tu música por mi espalda resbalan,
y que la sonata de tus sábanas me atrapa.

Que eres suave cómo una manta en invierno,
y cómo el polvo del que venimos.

Me desmayo si te miro durante más de cinco segundos,
no quiero existir, quiero que paremos el mundo,
que todo se detenga, tan inoportuno.
Pero que estemos tú y yo.

Que vuelen las palabras que nunca se dicen,
pero que las miradas no callen.

Que macabra ésta cloaca sin tu mata ratas...

Despierto y anoche pareció un sueño. Bajo por las escaleras de mi insomnio y en el fondo encuentro a mis miedos enfrentándose a lo que odio. Rescataste mi piel del abismo, aun sabiendo que no seríamos los mismos... La noche en que te conocí pulula por mis pestañas y me recuerda que fuiste una decisión, decisiones que si no hubiera tomado me hubieran llevado a un camino divergente al tuyo, y nos habría destrozado el orgullo. Suspiro en tus sábanas deseando volver mañana, sé que estas cosas tardan, que no es fácil amar sin andarse por las ramas. Amar lo sencillo y transparente, como tus ojos. Yo bebo de esa fuente cada vez que te miro y se me cae todo de repente. Eres bello y distante, nada corriente, como mis noches de poeta esquizofrénica. Las horas vuelan y ni nos damos cuenta, dando en tu cama mil vueltas, sintiendo como follan nuestras auras, y casi al amanecer me arrepiento de no saber. Complicidad en las miradas, silencios que dicen más que cualquier palabra, sonrisas que me funden el alma.

Te regalo unos versos...

Yo que amo tanto a la soledad,
y ahora me quema al despertar.

La complicidad, los silencios,
tus ojos en una espiral de cambios.
Me desangras pero no tienes precio,
me salvas de caer en manos de algún necio.

Sonrisa constante que viene a delatarme,
el frío al salir de tu cama,
tus sábanas, que me atrapan.

Acariciar tu espalda y querer morir en ella,
mientras la polución nos habla de las estrellas...

Estrellas que no llegaron,
que se quedaron en el camino
de entre tus labios y los míos,
que cómo dos fuerzas opuestas chocaron.


martes, 8 de enero de 2013

'Soy como el hijo de una suicida y un rebelde.'

Estás enfrente.

Gélido haz de paz el que surca mi mente cuando abres la boca,
impune el ejército de tus pestañas al aceptar cada derrota.
Y aquí estamos, enfrente con las miradas rotas, absortas.
















lunes, 7 de enero de 2013

Palpitando tengo mariposas esquizofrénicas en la barriga.


Acabas de plantar una semilla en el vientre de mi desidia, que me abandona pa irse a dormir en tus mejores pesadillas.


- Has llegao y al instante me has roto.

Increíble pero a tu pecho me anclaría.

Bastante que contaminas mi tranquilidad,
bastante que me llamas cuando el día acaba,
y justo cuando pensaba que ya no quedaba nada,
vienes a perturbar mis ganas de no estabilidad.

Justo te pienso y me llamas, 
ya no me veo en otras camas...

Y que se acabe el mundo,
me dijeron tus gélidos ojos.
Calientes como un baño bajo la Luna en agosto.
Y yo peleando por ocultar mi rostro.

Llegas tú y me arrebatas de la noche al día,
mi capacidad de mantener la sangre fría.







Con la voz rota y el alcohol por patria y va y te me apareces cómo si fueras pura magia, cómo si no importaran las desgracias y se evapora tu mirada en ese vaso de licor que melancolía me contagia...

Puta mierda de España.

Hoy he empezado mi 'proyecto' de libro. Para mí será un puzzle de ideas, citas, imágenes, escritos, poemas, dibujos... Un poco de todo. Más íntimo ya que sólo podré verlo yo y quién yo quiera. Bastante enfocado a la sociedad y a la política, con un toque ligero de nostalgia y amor. Lo único que espero de lo que escribo es que algún día alguien lo lea y le saque provecho, una sonrisa o le haga reflexionar.

Y en breves apertura de un blog más serio y ordenado... o eso espero. Continuaré con éste y su desorden y desquicios varios por supuesto.

Salud.

sábado, 5 de enero de 2013

Necesito tocarte.

Ojos gélidos y mirada cálida, 
piel suave y aromática.

Sangre caliente, voz suave,
haces que llegue dónde nadie sabe.

Y yo volviéndome loca tras ésta crisálida, 
que me atrapa sin querer tener salida 

si no es a tu ventana 
para amanecer mañana...





jueves, 3 de enero de 2013

Decisiones.



He encontrado un local al que llevarte en la ciudad,
entre cócteles y jazz... Ese es mi plan.

En un descuido me encontré con tus ojos,
la luna brillaba casi llena en la plaza,
no esperaba más, ni si quiera esperaba nada.
El invierno cae en tus pupilas cual agua helada.

Se me antojó deshacerme de algunos despojos,
con lo primero que tuve, tu voz acalló mi garganta.
Peleando con las cicatrices, escribo,
y mas no me atrevo a decir lo que pienso.

Quizá sea mejor callar por el momento,
aunque con certeza veo cerca el punto de no retorno.

El verano se ha llevado cosas de mi alma,
creí encontrar mi calma en una piel familiar,
en el despecho de un corazón a punto de estallar.

Y al llegar más frío, me encontré con una pequeña ficha de dominó mal colocada, que destrozaba con ansia todas y cada una de mis expectativas.